REE KOHL: “Syd Barretina no es una prioridad en mi trayectoria musical y sólo me centro en componer y grabar mis propias canciones”

Bajo el nombre de Ree Kohl se agazapa Jordi Ricol, un músico barcelonés que lleva más de dos décadas en el mundo de la música en diferentes proyectos. Hace tan sólo unas semanas ha publicado “Live At Hangar 05”, un directo perteneciente a la puesta de largo de “III” (2013), disco de estudio que ha significado un éxito incontestable de público y crítica. A caballo de todo ello, ha recuperado a Syd Barretina, que le dio cierto renombre gracias a sus particulares relecturas de los temas de Pink Floyd. De ello y mucho más, charla Kohl con Federico Navarro, redactor de Popular 1 y con el que ha coescrito varias de sus letras.

Ahora que ya ha pasado un tiempo, ¿crees que “III (2013)” es el disco que ha significado un punto de inflexión en tu carrera?

Creo que sí. No es fácil encontrar tu sonido y menos en el primer disco, a no ser que seas Guns N’Roses o un artista con las ideas muy claras desde el primer momento. Se da en muchas ocasiones que el mejor disco de un grupo es el tercero o cuarto que editan. Ahí tienes “Destroyer”, “Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band”, “Pyromania” o “Dark Side of the Moon” que corroboran mis palabras. Me siento muy a gusto en la línea del Hard Rock propio de finales de los setenta o primeros ochenta, ese sonido que busqué en “III”.

Por eso tiene cierta lógica que grabaras “Live At Hangar 05” (2015), un directo dedicado a su gira de presentación. Cabe añadir que te encontrabas con una banda hecha realmente a tu medida.

No es fácil encontrar a las personas adecuadas para un proyecto de estas características, algo tan personal. Y que, además, toquen muy bien su instrumento, sean buenas personas y crean en tu música y, por si eso fuera poco, te apoyen sin pedir nada a cambio. Es algo que no tiene precio, sólo puedo estarles agradecido.

Entre ambos discos, grabaste “Cold War Remake” (2014), una manera de reescribir el que fuera tu debut, “Cold War” (2008) porque no acababas de estar satisfecho de su sonido.

Bueno, en estos últimos años he mejorado mucho como productor. He pasado cientos de horas en mi estudio, luchando con la tecnología que tenía a mano, para sacarle el mejor partido y por eso regrabé el disco. Aunque en su momento estaba muy orgulloso de ese trabajo, con los años acabé pensando que era necesario darle una vuelta de tuerca. Creo que las canciones lo merecían y “Cold War Remake” era, sencillamente eso, darle a esos primeros temas una producción que los hiciera brillar más.

Por otro lado, parece que vuelves a hacer renacer a Syd Barretina, tu particular proyecto vinculado a Pink Floyd, en un concierto que tendrá lugar en el bar La Maceta de Barcelona el próximo 28 de noviembre. En más de una ocasión has anunciado que ibas a abandonar esta faceta, pero parece que Syd es un gato con más de siete vidas que se niega a desaparecer.

Sinceramente no es un proyecto que a día de hoy centre totalmente mi atención. De momento sólo tengo planeado el recital que citas, ya sabes, el día 28 de Noviembre en La Maceta. Si me he decido a volver de nuevo con esa iniciativa es simplemente porque mi mujer ha insistido en que haga un concierto de canciones de Pink Floyd, porque a ella le gustan mucho. Actualmente, Syd Barretina no es una prioridad en mi trayectoria musical y sólo me centro en componer y grabar mis propias canciones. De todas formas, tú ya sabes que lo mío no es un tributo al uso, sino unas versiones acústicas con efectos que difieren mucho de lo que fueron los temas originales. No se trata de clonar esas piezas, sino de darles una nueva vida.

Siguiendo con Syd barretina ¿No podrías ofrecer en un concierto de Barretina tres o cuatro piezas de Ree Kohl?, ¿no pueden ambas facetas ir más compenetradas en lugar de ser dos entes tan independientes entre sí?

Por tocar algún tema mío no pasaría nada, pero no abusaría de ello. Piensa que la gente ha pagado una entrada por escuchar a Pink Floyd aunque sea mi manera. Si les toco la mitad del repertorio de mi propio material podrían ofenderse. Sería darles gato por liebre, aprovechando el filón de Floyd y no me parece honesto. Es por eso que son dos proyectos independientes.

Me pareció muy curioso que el pasado 2013, intentando promocionar a Ree Kohl al máximo, publicaras un compacto dedicado a Subconscious, una de las bandas de tu adolescencia. Cuando me hablaste de ello, te aconsejé que lo sacaras bajo el nombre de Ree Kohl, para tener el álbum de Thrash Metal que nadie se esperaba en ese momento y que iba a descolocar a todo el mundo.

En la línea de lo que comentábamos antes, no me parecería honesto editar un disco con el nombre de Ree Kohl, cuando se trataba de un material que ya fue editado en su momento bajo el nombre de Subconscious. Aunque su repercusión fuera minúscula, prefiero que cada cosa tenga su nombre. Pese a eso, ese disco siempre supondrá una curiosidad para mis seguidores.

Por otro lado, de tanto en tanto se te puede ver por el Antikaraoke de César Martín, ¿es el director de Popular 1 alguien que te haya influido significativamente a la hora de descubrir nuevas bandas, sobre todo en los años en los que Internet todavía no existía?

Popular 1 me ha convertido en lo que soy ahora, ya que es una revista que compro desde mediados de los noventa y, sencillamente, forma parte de mi vida. Cualquier persona que se haya sumergido en sus páginas, sobre todo en esos años, le debe mucho a César Martín y yo no soy una excepción. Teniendo en cuenta estos precedentes, cuando conocí a César fue un auténtico shock. Hace diez años me llamó por teléfono y me propuso actuar en un “Open Mic” que él organizaba en el Teatro Llantiol de Barcelona y evidentemente le dije que sí a todo. A los cinco minutos le llamé yo, para que me repitiera lo que me había propuesto, diciéndole que me había quedado tan alucinado con la llamada del director de Popular 1, que no había entendido nada de lo que me había dicho: recuerdo que se río y me lo volvió a explicar todo una vez más.

Luego fuiste un habitual de Antikaraoke, tanto en el Llantiol, como en Sidecar y luego Apolo. Cesar Martín dijo en una entrevista en este mismo medio, que el Antikaraoke empezó contigo… (aquí podéis leer la entrevista)

Sí, es un gran honor que alguien como él me cite en este caso. Es como si Frank Sinatra dijera que yo soy su mayor influencia musical. Hubo una temporada que iba cada lunes al Antikaraoke. El ambiente era fantástico, muy divertido, con grandes cantantes en el escenario. En los últimos años he ido bastante menos, no por no tener ganas, sino por responsabilidades laborales y familiares. Aún así, siempre que puedo voy al Antikaraoke de Cesar Martín, que ahora se celebra en la sala Monasterio de Barcelona y en muchas otras localidades de la geografía española, y sigo disfrutando como el primer día. Lo mismo que con mis canciones; de hecho tú insististe muchas veces, durante la época dorada de Syd Barretina, en que tenía el talento suficiente para componer mis propios temas y, en aquel momento, yo estaba empeñado en mis recreaciones de los temas de Pink Floyd y me negaba a ello. Ahora, en cambio, parece que el único de los dos que añora a Barretina seas tú (risas).

TEXTO: FEDERICO NAVARRO
FOTO: CRISTIAN BERTOLO