El Musicógrafo – Mayo 2014

11 de junio de 2014

El mes de Mayo de 2014, apareció en la revista EL MUSICÓGRAFO una entrevista con REE KOHL. ¡Que la disfrutéis!


TEXTO: JULIO CAMINERO
FOTOS: CHRISTIAN BERTOLO

¿Quién es Ree Kohl? Nos gusta saber como te defines a ti mismo.

Bueno, en realidad es muy sencillo. Soy Jordi Ricol, alter – ego de Ree Kohl. Un tío de 39 tacos, de clase humilde, de Barcelona, que toca la guitarra, el bajo, teclados, programa baterías, canta, escribe canciones y se graba sus propios discos. El proyecto de Ree Kohl como tal empezó en 2008. Casi cada año escribo y grabo un disco tocando casi todos los instrumentos, con la intervención de algunos colaboradores para darle más riqueza al trabajo. Actualmente en directo llevo una banda con cinco músicos para presentar las canciones.

Una trayectoria de unos cuantos años ya sea con Ree Kohl, tu proyecto en solitario, o con Syd Barretina, tu banda de tributo a Pink Floyd, o Killing Machine, tu otra banda de tributo, pero esta vez tributo a Judas Priest. ¿Cuantos años llevas dedicándote a la música?

Empecé a tocar la guitarra en a finales de los ochenta con trece o catorce años. Mi primera banda seria fue Jack Flash a principios de los noventa. Tocábamos un Hard – Rock muy básico. Éramos bastante malos, pero eso era normal porque éramos muy jóvenes e inexpertos. Durante esa década estuve tocando música muy dura: primero en Lepra y, más tarde, en Subconscious, cuando ya empecé a cantar. A mediados de los noventa inicié el proyecto Jr. Subconscious, donde pasé de tocar música como Sepultura a un rock intimista y un poco melancólico muy influenciado por Jeff Buckley. A principios de los 2000 ya me transformé sencillamente en Ricol; hacía pop rock y empecé a cantar en castellano y, después, en catalán. En 2003 dejé de tocar mi propio material y me puse a hacer versiones de Pink Floyd yo sólo con mi acústica. Nacía así el proyecto Syd Barretina, que es el que más bolos me ha dado y me dio la oportunidad de realizar varias giras por España siendo telonero de bandas legendarias como The Alan Parsons Project, Asia o Kansas. En 2007 lo empecé a combinar con Killing Machine, donde rendíamos tributo a Judas Priest. Este grupo se separó en verano de 2013 y, como te comentaba, en 2008 empecé el proyecto Ree Kohl, el retorno definitivo a mis propios temas. Pero, en esta ocasión, volví a componer en inglés y combinándolo con Syd Barretina y Killing Machine, hasta que decidí que lo mejor era centrarse sobre todo en Ree Kohl aunque, si se tercia, a veces actúo como Syd Barretina.

Tus discos anteriores no han sido de Hard Rock, ¿por qué ese cambio de estilo para tu último álbum?

Efectivamente los anteriores discos son muy diferentes. El primero, “Cold War”, es muy variado a nivel estilístico el segundo, “The Neanderthal Phyletic Problem”, bebía más de Pink Floyd y de otras bandas progresivas. ¿La razón? Un homenaje a toda la música de mi adolescencia y que me ha acompañado, en mayor o menor medida, durante más de veinte años.

Y lo más importante. ¿Por qué quieres volver a los ochenta?

Volver a los ochenta es un ejercicio de pura nostalgia. ¿El motivo? La frontera de los cuarenta está ya muy cerca. Mi vida ha cambiado mucho: tengo responsabilidades, familia, trabajo, etc… En definitiva soy un adulto, pero en el fondo sigo siendo aquel chaval de catorce años que soñaba con ser una rock star. Como dice uno de los temas, “Wild Child”, mientras suene el rock and roll, seré eternamente joven. Para recordar esos años dorados de la juventud, en la portada aparecen Daredevil, Diana de V, El coche fantástico, El gran héroe americano… Eso forma parte de mi adolescencia, de mi cultura personal y los llevaré conmigo hasta la tumba. La idea del diseño fue de Federico Navarro, escritor y periodista de Rock and Roll Popular 1, que captó perfectamente lo que quería transmitir. Llevo años escribiendo muchas de las letras con él, somos muy buenos amigos y, al formar parte de la misma generación, es muy fácil trabajar juntos; coincidimos en muchos gustos y los dos amamos la música de manera incondicional.

Solo escuchar “I wanna live” canción que abre tu último disco “III”, uno piensa que es un disco que se ha colado entre nuestra colección de Hard Rock ochentero. ¿Cuanto te ha costado darle ese toque ochentero a este disco? No es tarea fácil.

Creo que para poder crear ese ambiente ochentero, hay que analizar lo que yo llamaría una fórmula o combinación de factores para conseguir ese resultado. Lo analizaría a partir de tres parámetros: la composición de las canciones, la grabación y producción del disco. O sea, en cuanto a la composición de las canciones, lo primordial para sonar así es, escribir buenos riffs, melodías sencillas y claras, estribillos pegadizos y transmitir siempre positividad. En cuanto a la producción, las guitarras distorsionadas han de ser muy limpias, el sonido de la caja muy gordo, añadir coros a tope -y en diferentes tonos- y una buena reverb envolvente. Toda esa mezcla es, en mi opinión, lo que define ese sonido tan característico de esa época.

Las bandas de aquella época, los geniales ochenta, se han reciclado y ya no suenan como sonaban. Digamos que se han “modernizado” ¿No crees que este tipo de rock está ya pasado? ¿Por qué quieres que tu música suene a las bandas ochenteras?

Ese sonido forma parte de una época que ya no existe en la actualidad, pero todavía perdura en la mente y los recuerdos de miles de personas, por lo tanto según mi opinión sigue siendo vigente.
Si quiero que Ree Kohl suene ahora así, es por los motivos que antes te comentaba y también porque creo que ofrecemos algo distinto a lo que hay en la escena de Barcelona. Dicho de otra manera, no somos perro-flautas, ni tocamos rock calimochero y estamos muy alejados de los denominados indie. Hacemos rock duro americano clásico y elegante; creo que hay muy pocos grupos ahora mismo que practiquen este estilo en la actualidad.

He leído tus influencias y parece que te quedas con el Hard Rock de principios de los ochenta. Pero las joyas como 1987 de Whitesnake, Crazy Nights de Kiss, Slippery when wet de Bon Jovi, el glorioso Hysteria de Def Leppard y el genial 5150 de Van Halen están grabadas a mediados de los ochenta. ¿No crees que a mediados de los ochenta fue el momento álgido del Hard Rock Americano?

Estoy totalmente de acuerdo contigo. Esos discos que citas son auténticas maravillas y me encantan, pero no estaría siendo objetivo si dijera que “III” suena como “Hysteria” o “1987” ¡ya me gustaría! Las canciones del disco son más sencillas y no tan excesivamente producidas ni arregladas, como en esos discos que nombras. Sería más acertado afirmar que tienen un sonido más cercano a “Lovedrive” de Scorpions, a “Unmasked” de Kiss o “Ready and Willing” de Whitesnake que no a “5150” de Van Halen o “Slippery when wet” de Bon Jovi.

Antes de seguir hablando de tu ultimo disco háblanos de tus dos pasiones, Pink Floyd y Judas Priest. ¿Por qué rendirles tributo?

Bueno, en resumen sobre los dos tributos y siendo muy sincero, te diré que lo hice por el mismo motivo que lo hacen la mayoría de músicos que tocan en este tipo de bandas: harto de tocar para diez personas me puse a hacer versiones de estos grupos principalmente porque me gustan. Pero reconozco que una vez lo probé, descubrí que – a diferencia de cuando estaba en bandas donde interpretaba temas propios- los conciertos se llenaban. Había ahí un público ansioso por escuchar canciones que ya conocían de antemano, coreaban y aplaudían con efusividad y, a la hora de pasar caja, volvía a casa con un poco más de dinero que antes; no mucho más, tampoco hay que exagerar, este sigue siendo un negocio muy duro. Años más tarde, vi que era una etapa que había que cerrar y que era el momento de pasar página.

Volvamos a III, tu último disco que podemos escuchar en Spotify. ¿Dónde has grabado este álbum?

Pues lo he grabado en el estudio que tengo en el barrio del Buen Pastor en Barcelona. En su momento lo bauticé como “Sona K Trona Productions” y además de grabar mi propio material, trabajo con más grupos que me lo piden. Modestamente siempre me ha gustado trabajar de productor. Estos días he estado acabando la producción de “Toni Largo i els Argonautes” que practican una mezcla muy bien encontrada de música electrónica y rock. Mi anterior trabajo fue grabar las guitarras del último disco de Johnny B. Nasty, titulado “Nastivity in Black”, que es de los mejores discos de rock duro en castellano que he escuchado hasta la fecha.

La mayoría de instrumentos los has grabado tu con algunas colaboraciones. ¿Te gusta grabar a ti todas las partes para que sea lo más fiel a lo que tienes en la cabeza?

Sí. Sobre todo con la tecnología actual resulta muy sencillo. Utilizo Ez Drummer para hacer las baterías; grabo los bajos, las guitarras acústicas y eléctricas, voces, lo mezclo y masterizo yo mismo. Siempre cuento con colaboradores, porque creo que pueden aportarme cosas interesantes. Por un lado, escribo toda la música y las melodías. Ya te comenté que con Federico Navarro hacemos casi todas las letras. Por otro lado, han participado haciendo coros Johnny B. Nasty, que lideró el grupo Nasty Army; Fede Acosta, que hizo de promotor del concierto de Sherpa, y siempre vinculado al Rock, y Jordi Planas (ex- Dracma y ex- Negua). Por otro, Luitgi Marsà (Voll Band y Toni Largo) y Javier Dorado (ex – Killing Machine y Naxs) han grabado varios solos de guitarra y Yuri Vargas (ex – Killing Machine) añade el bajo en un tema y el propio Federico Navarro, que ha recitado una estrofa en “Superman Serenade”.

Ya os tuvimos el año pasado en el programa, en nuestro último programa en nuestro plató. ¿Ha habido alguna incorporación a la banda o seguís los mismos?

Hemos cambiado de batería y hemos añadido a una corista. La banda actualmente está formada por Jordi Ricol a la voz, guitarra rítmica y compositor. Luis Marsà es el guitarra solista y hace coros. Yuri Vargas toca el bajo. Jordi Steve es el nuevo batería y Alexia Molina también se ha incorporado a los coros

Háblanos de las fechas de la gira de III que este 2014 tienes previstas.

Pues la fechas que tenemos para este año son:
7 Marzo – MONASTERIO – (Barcelona) – Junto a CHAQUETEROS
5 Abril – JOKERS MC HOUSE – (Barcelona) – Junto a LIPSTICK
31 Mayo – ROCKSOUND – (Barcelona) – Junto a SHERPA (ex – BARÓN ROJO)
14 Junio – CONTINENTAL – (Barcelona) – Junto a MALA DIGESTIÓN
20 de Septiembre – TEMPLE BAR ANDORRA – Escaldes-Engordany (Andorra)
18 de Octubre – RAZZMATAZZ 3 – (Barcelona) – Junto a LIPSTICK y más bandas por confirmar

¿Imagino que estarás emocionado de ser telonero de Sherpa en el concierto del próximo 31 de mayo en la sala RockSound de Barcelona?

La verdad es que es un gran honor. En diciembre de 2012 ya le teloneé como Syd Barretina y fue maravilloso. Sherpa es una persona muy cercana, muy amable y cariñosa. Es un músico excepcional. Todos hemos crecido escuchando sus maravillosas canciones en Barón Rojo. Va a ser una gran oportunidad para darnos a conocer a mucha gente y además tendré el honor de cantar con el “Con Botas Sucias”

¿Para cuando un nuevo videoclip?

A principios de Mayo rodaremos el vídeo de “Come Hell or High Water” y se encargará de la realización Oscar Sánchez Mojica, que ya grabó el de “Superman Serenade”. Además, vamos a grabar en vídeo y audio un concierto sin público. Lo utilizaremos como carta de presentación en Youtube de cara a buscar más bolos.

Queremos agradecerte que hayas querido contarnos tantas cosas y esperamos volverte a tener muy pronto en la revista o quien sabe en nuestra segunda temporada de El Musicógrafo TV. Mucha suerte y hasta muy pronto.

Muchas gracias a vosotros. Aprovecho para felicitaros y daros muy sinceramente las gracias. Personas como vosotras sois un auténtico rayo de luz en un mundo lleno de oscuridad, donde casi no hay medios que apoyen la música, y menos el rock duro.

Y respecto a volver a El Musicógrafo TV, estaremos encantados de hacerlo. La otra vez que fuimos fue realmente fantástico. La labor que realizáis no tiene palabras. Sería imprescindible que alguna TV en este país hiciera un programa como el hacíais y las cosas serían un poquito más fáciles para los músicos “underground”. Muchas gracias de verdad. Un abrazo para vosotros y también para los lectores.